Estigma familiar

Estigma familiar

La estigmatización que se asocia con la enfermedad mental incluso puede proceder de los familiares, quienes a su vez la reciben de la sociedad. Algunos reaccionan no hablando del trastorno con nadie durante años, ni siquiera con las amistades más estrechas.

Quienes discuten el tema con franqueza pueden verse despreciados por sus conocidos. Otros familiares responden aislándose socialmente. Aunque los familiares tienden a negar el estigma, su ocultación y su retraimiento indica un sentimiento subyacente de vergüenza, que desemboca en aislamiento.

Algunas de las actitudes negativas de la familia que recibe la persona con enfermedad mental son:

  • Comentarios despectivos
  • Consejos desalentadores
  • Comportamiento de rechazo
  • No dar consejos prácticos
  • La persona con enfermedad se siente ignorada
  • Le hacen sentir culpable
  • Sobreprotección

El impacto en la familia es muy alto y no siempre fácil de llevar. Los trastornos mentales graves, a menudo generan una importante carga familiar, que recae generalmente sobre la madre o la hermana del o la paciente. La persona cuidadora puede padecer sentimientos de pérdida, restricciones sustanciales de su vida social y pérdida de oportunidades laborales. A ello hay que añadir la preocupación, incluso la merma de su propia salud mental, y los efectos negativos, percibidos sobre la vida de la familia. Además, la culpabilidad con la que cargan algunos padres y madres es el resultado de un concepto erróneo popular por el que se cree que la enfermedad mental es el resultado de una mala educación.

Última modificación: martes, 29 de marzo de 2016, 14:06